No todos los burros son tan Burros

El día de ayer estudiamos la historia de Balaam y su mula. Iniciamos la lección llevando con orgullo unas grandes orejas de burro, bueno esa fue la intención! Unos decían que eran de conejo ,otros si estuvieron en acuerdo con la maestra. Lo importante fue que se obtuvo la atención de los niños y ellos estaban ansiosos por conocer la historia.
Es muy interesante como nos enseña la palabra de Dios por medio de esta historia como podemos perder la capacidad de ver lo supernatural que Dios nos quiere mostrar por desobediencia. Como podemos llegar a ser mas tercos que una mula e insistir en decir o hacer algo que no es la voluntad de Dios.
Los niños lo entendieron y llegamos a la conclusión de que es mejor ser como la mula de Balaam obedientes a insistir en nuestra terquedad y perder la capacidad de ver lo que Dios nos quiere mostrar. Dios les Bendiga.

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